miércoles, 20 de febrero de 2019

Una rosa que se ofrenda al amor


Tal vez con palabras pueda construirte.
Tratar de entender de que estas hecha:
si de rosas o algodón de azúcar,
si de abrazos o caricias.

Un hechizo de dientes
es tu sonrisa,
que se clava en mi pecho
y desnuda la mía.

Un suave grito de hojitas
se siente en tus manos
y yo en actitud de roció
quiero leer su historia.

Envuelto en tu cuerpo
perturbas mis males,
salpico mis molestias
y me vuelvo paz hecha carne.

Sé que cada día nuevo,
el cielo nos dará los buenos días,
los arboles bailaran el vaivén del viento
empapándonos del aroma
floral de invierno;
la vida nos tendera la alfombra dorada,
tejidas en rayos de sol,
que fueron primero acariciados
por la nubes que condensan sonrisas.

Y lo que este ahí en frente
no será malo,
será de la misma naturaleza
que tú:
una rosa que se ofrenda al amor.